Cuando se hacen muchas fotos de lugares diversos, conviene etiquetarlas con el lugar dónde se han tomado. Esto puede resultar mucho más sencillo si añadimos al fichero Exif (que viene adjunto al archivo de cualquier fotografía digital) las coordenadas del lugar de la toma.
El método más sencillo (y más rupestre) es utilizar Picasa (Google) y manualmente (recordando dónde hicimos la foto) asignarle el lugar en el que la hemos tomado; sin embargo, si esta operación hay que realizarla con cientos de fotografías, el proceso se vuelve sumamente tedioso. Para evitar este inconveniente debemos de disponer de un GPS adicional (cualquier teléfono móvil que lo incorpore será suficiente).
1. En el caso de utilizar un smartphone (android), descargamos la aplicación My Tracks de Google y grabamos el recorrido que hagamos para la toma de fotografías.
2. En el caso de utilizar un GPS también grabamos el recorrido en un fichero con formato gpx.
3. Volcamos el fichero al ordenador (PC)
4. Descargamos el programa Geosetter (http://www.geosetter.de/en/) que nos permitirá combinar las fotografías con el fichero gpx que hayamos grabado (bien con el móvil o bien con un GPS).
5. Puede ocurrir que exista un cierto desfase entre la hora del fichero gpx y la hora de nuestra cámara de fotos. Esto no supone ningún problema porque el programa Geosetter permite ajustar esa diferencia de tiempos, para ello testearemos alguna fotografía de la que recordemos su ubicación y ajustaremos el tiempo hasta que la ubicación que nos proporciona Geosetter sea la exacta.
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